Seguro que habéis oído el dicho "Todos a una como en Fuenteovejuna" sacada de ese clásico de Lope de Vega, en el que los vecinos de un pueblo cordobés se unen para matar al Comendador por los numerosos agravios cometidos. Bien ayer viví una escena que me recuerda remotamente a aquel clásico, aunque salvando las distancias en el pueblo guadalajareño de El Casar no querían liquidar físicamente al alcalde. Únicamente pretendían que dimitiera o que aclarara dónde estaban los 100.000 euros destinados para las fiestas patronales de 2009, después de que el finado optara por anunciar sorprendentemente a los miembros de la Comisión de Festejos que de fiestas nada de nada.
Como siempre en estos casos la crisis apareció como la explicación más asequible, para justificar bajo la austeridad el flagante incumplimiento de las partidas presupuestarias. De por si, la denominada Comisión de Festejos ya propuso un recorte de los fondos dedicados a fiestas desde los 240.000 euros a 100.000 euros, para terminar con el anuncio unilateral (sin consulta a vecinos u oposición) de que el Ayuntamiento de El Casar no iba a costear las Fiestas Patronales.
¿Por qué antes había 100.000 euros y ahora no? O mejor, ¿por qué se habla de austeridad y ayuda a familias necesitadas por la crisis, si el alcalde no ha dado un duro al centro local de Cáritas? ¿Por qué dar dinero por la Candelaria y no por las patronales? En fin, como dijo una vecina "no sabemos lo que hay detrás de esta decisión". Espero que pronto se den las oportunas explicaciones desde el Consistorio. La solución próximamente, ya iré contando...
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